lunes, 17 de enero de 2022

#NOQUIEROCREERQUIEROSABER PARTE 1

 

Hablar de conocimiento genera cierta confusión, dado que para algún@s lo es una fórmula de cinemática, mientras que para otr@s, puede ser la personalidad de los tauro.  Ciencia v/s pseudociencia.  Por tal motivo,  es fundamental recurrir a la epistemología.

De acuerdo a cierto consenso dentro de la epistemología, una afirmación es pseudocientífica si cumple con estas tres condiciones: a) referirse a un tema dentro del dominio de la ciencia  b) Sufrir de una falta de fiabilidad y  c) sus proponentes intentan crear la impresión de que representa el conocimiento más confiable en un tema.

Siguiendo esta idea, Hansson (2017), filósofo de la ciencia plantea entre otras características epistemológicas de las pseudociencias:

1)    1) "la cosecha de cerezas": las pseudociencias  aprovechan las "cerezas" que contradicen el consenso científico  mayoritario. En palabras de Kuhn “anomalías”.

Por ejemplo, el famoso paper de The Lancet en el que se asociaba el autismo a las vacunas (ya desacreditado) y que aún es aprovechado por movimientos antivacunas;  otro ejemplo es  sacar de contexto citas que hablan de desacuerdos entre investigadores,  tal es el caso de las discrepancias  en la evolución, lo cual aprovechan para difundir que no existe.

2)    2)  construir falsas controversias: cuando no se puede convencer a la gente de la existencia un punto de vista "alternativo", se afirma que el tema está abierto y que está siendo discutido por la ciencia. Esto sucede con los negacionistas, por ejemplo los terraplanistas o negacionistas del cambio climático, quienes usan los medios de comunicación para enseñar sus “teorías”.

En tanto, la homeopatía  y la astrología, como promotores de pseudoteorías, no intentan generar controversias con la ciencia sino todo lo contrario, afirman ser formas complementarias del saber científico. Sus explicaciones apelan a la emotividad y fácil comprensión de la gente; por ejemplo, los terraplanistas en sus “demostraciones” hacen uso directo de los sentidos, los homeópatas indican “las abuelitas te daban un té de menta para el dolor de estómago”. 

Como lo hace notar Isaac Asimov en el artículo “Un culto a la ignorancia”, estamos  frente a una ola de anti-intelectualismo, en la cual "mi ignorancia vale tanto como tu saber" o "no confíes en los expertos", lo actualmente se encarna por fenómenos de posverdad como que el calentamiento global no tiene origen antrópico, la plandemia, etc.  Es así que hoy el caballito de batalla es “todas las creencias son respetables”.

¿Ahora quién podrá defendernos?

 

Fuente: Álvarez, M. (2019). Elementos para el análisis de las pseudociencias.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por comentar.
Recibirás pronta respuesta y si lo deseas, información extra sobre el tema.